Los orígenes de nuestro sabor
Los orígenes de nuestro sabor
Nuestra historia comienza en un Salón de Baile reconvertido en una pequeña aldea Asturiana, desde la que pronto viajamos hasta la meseta castellana para fundir nuestro conocimiento y tradición con la de unos artesanos queseros de experiencia centenaria.
Y es que hablar de queso castellano hace inevitable pasear por la historia. La nuestra y la del queso. Porque la historia de nuestro queso ha sido escrita por los pastores castellanos, conocedores de los mejores pastos de las dehesas castellanas para su ganado, a través de sus vías y cañadas de trashumancia.
La más importante de ellas, la “Ruta de la plata”, desde la que pudieron intercambiar conocimiento y espacio con pastores de otros lugares, hasta convertirse en el sustento de los peregrinos que hacían el Camino de Santiago, expandiendo por sus senderos sus distintas variedades.
Más tarde, durante los siglos venideros, se fueron perfeccionando y divulgando las técnicas artesanales de elaboración de este preciado queso mediante tratados y escuelas, que, a través de Señorío de Montelarreina hemos mantenido hasta nuestros días en esta casa.
Un tesoro por su sabor y un regalo fruto del esfuerzo de muchos siglos para que podamos disfrutar en nuestros hogares de un sabor auténtico, ofreciéndonos un poco de historia en cada bocado.